La radio como
estrategia para la iglesia católica:
La mayoría de las radios comunitarias, populares y alternativas
nacieron en el marco de organizaciones que existían previamente. Esta
característica de las radios, distinguiéndolas de otras emisoras que también
nacieron años atrás: Más allá de personas
entusiastas, guiadas por fines comerciales
o de servicios, se pueden observar que algunas emisoras, quizás las menos, surgieron del anhelo de comunidades
organizadas por poseer un medio de comunicación que les sirviera de voz. Así encontramos centros
comunitarios o vecinales que
usan el medio para pasar información sobre sus actividades y con un propósito de educación popular. También
están los centros culturales que descubren en el medio una herramienta de difusión de la cultura local.
Las radios
gestionadas por grupos parroquiales o por instancias de la Iglesia que ven la necesidad de una
comunicación más directa con sus comunidades. Y por último, también los partidos políticos recurren a este medio para
lograr una divulgación de sus
propuestas y la participación de las bases más activamente en la discusión de los temas que les incumben.
Todas estas emisoras tienen un origen en común: surgen como consecuencia lógica de un trabajo previo de
organización que para fortalecerse echa mano de este medio de
comunicación.
Se dice entonces que
la iglesia ve la necesidad de una comunicación más directa con sus comunidades. El medio de difusión contemporáneo es decir, la
radio. Aunque no disponga de la riqueza de elementos espectaculares y de las
ventajosas condiciones de ambiente de que goza el cinematógrafo, la radio
posee, sin embargo, grandes posibilidades, que todavía están por explotar. La
radio tiene el privilegio de estar libre y desasida de las condiciones de espacio
y tiempo que impiden o entorpecen los medios de comunicación entre los hombres.
Con todo, creemos que el más noble servicio que está llamada a prestar es el de iluminar y educar al hombre orientando su mente y su corazón hacia las esferas cada vez más altas del espíritu.
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